RUSIA SE PREPARA PARA IMPACTO DE ASTEROIDE MIENTRAS SE ACERCA UN COMETA AL SOL
Enero 3, 2010.
Por: Sorcha Faal y como se informa a sus suscriptores Occidentales
Científicos Rusos están informando el día de hoy que el peor Mínimo Solar Profundo de nuestro Sol en 100 años ha sido roto por un cometa recién descubierto y que actualmente se va internando en su superficie y que ha aumentado estos pasados meses la Mancha Solar a 15.7, el más alto que haya habido en el Ciclo Solar 24 desde marzo de 2008, y ha causado una vasta erupción de las explosiones solares Clase C en los últimos 16 años.
El físico Solar David Hathaway del Centro Marshal de Vuelos Espaciales de la NASA, había declarado en 2008 sobre el Ciclo Solar 24 que fue “el año más vacío de la era espacial”, una declaración que revisó en 2009 cuando señaló que “Este es el sol más tranquilo que hemos visto en casi un siglo”.
Tan poderoso ha sido este Mínimo Solar Profundo durante este ciclo que los científicos han reportado una baja en 50 años de la presión del viento solar, una baja en 55 años en las emisiones de radio y mucho más importante, una baja en 12 años de la “irradiancia” solar, la brillantez del sol que ha caído un 0.02% en longitudes de onda visibles y un 6% de longitudes de onda de Ultra Violeta extremo desde el mínimo solar de 1996.
El peligro crítico para nuestro planeta con la caída de la brillantez del Sol está en sus niveles de “irradiancia” que desde hace mucho se han asociado con períodos de enfriamiento global, incluyendo el catastrófico período entre los siglos 16 y 19 llamado La Pequeña Era de Hielo, un hecho del que se ha acusado a los científicos Estadounidenses de ocultar al público para hacer avanzar las ahora ya desacreditadas teorías del calentamiento planetario.
Pero el peligro más grande que enfrenta nuestro planeta no procede de los espantosos efectos de un enorme Enfriamiento Global que podría acaecernos, advierten los científicos Rusos, sino más bien de su creciente potencial de que la Tierra sea impactada por o “interactuar eléctricamente” con un cometa emanando de la desestabilizante Nube de Oort desde la cual, cada vez más frecuentemente, se están lanzando “misiles espaciales” hacia nuestro Sistema Solar.
Tal “interacción eléctrica” entre estos “misiles espaciales” de la Nube de Oort internándose en nuestro sistema solar hacia el Sol ya está sucediendo y está ofreciendo evidencia que sirve de apoyo a las afirmaciones de los científicos Rusos después del descubrimiento hecho por el astrónomo amateur Australiano Alan Watson quien encontró este “nuevo cometa” mientras revisaba imágenes obtenidas por el Visor de Imágenes Hemisférico STEREO-A’s de la NASA (fotografía superior izquierda).
Es importante observar en este punto que los científicos Rusos están firmemente opuestos a sus contrapartes Estadounidenses sobre lo que constituye un cometa y lo que define sus interacciones en el espacio. De ahí que los científicos Estadounidenses señalan en sus teorías que los cometas son “bolas de nieve sucias” cuyas colas son formadas por la expulsión de una masa de hielo, los científicos Rusos se inclinan por la teoría de que están hechos de hierro y otros metales cuyas colas se forman por la interacción electromagnética entre ellos y el Sol. Esto se conoce como la Teoría del Cometa Eléctrico.
El cometa que actualmente se está internando en el Sol cuya llegada fue anunciada hace como quince días con el rompimiento del Mínimo Solar Profundo y la expulsión masiva de explosiones solares apoya las teorías de los científicos Rusos más allá de toda duda, sin embargo, lo que los Estadounidenses no reconocerán pues sus teorías nunca han sido pensadas para dar a conocer la verdad, sino más para el moldeamiento social de su pueblo para mantenerlo lo más alejado posible del conocimiento de lo que el futuro guarda para nuestro planeta.
Y lo que más temen los científicos Estadounidenses por encima de todo es que su pueblo sepa del gigantesco cuerpo planetario llamado G1.9 que se dirige hacia nosotros y que está ahora a un distancia de 60 AU’s (1 AU=la distancia del Sol a la Tierra) de nuestro planeta y que está creciendo en tamaño.
Aunque desconocido para el pueblo Estadounidense el G1.9 desde su descubrimiento la NASA ha seguido sosteniendo que son los restos de la explosión de una supernova que sucedió hace 140 años, una explicación considerada “absurda” por los científicos Rusos que señalan, correctamente, que si una supernova hubiera explotado dentro de nuestro sistema solar a mediados de 1800, hubiera sido no sólo visible para toda la Tierra sino que hubiera sido documentada extensamente.
Apoyando a estos científicos Rusos que señalan que el G1.9 no fue nunca una supernova sino más bien o nuevo planeta para nuestro sistema solar o un sol enano café, están los astrofísicos Españoles cuyos hallazgos podemos leer como sigue:
“El G1.9 fue identificado la primera vez como “restos de una supernova” en 1984 por David Green de la Universidad de Cambridge y más tarde estudiado en mayor detalle con el radiotelescopio Very Large Array (VLA) de la NRAO –Observatorio Radio-astronómico) en 1985 porque era una supernova extraordinariamente pequeña que se creyó era demasiado joven – con menos de 100 años de edad.
Pero en 2007, las observaciones con Rayos X hechas en el Observatorio Chandra de Rayos X de la NASA revelaron que el objeto ¡Era mucho más grande que la última vez que había sido observado! Había crecido un 16% en tamaño. Perplejos por esta observación, el Very Large Array repitió sus observaciones de hace 23 años y verificó que había aumentado en tamaño considerablemente. Sabiendo que una supernova no se expande así de rápido, a menos que acabe de explotar, explicaron que el G1.9 debe ser una supernova “muy joven” – tal vez no más de 150 años de edad. Pero no existe registro de que se haya encontrado una supernova visible correspondiente a ese período histórico (alrededor de la época de la Guerra Civil Estadounidense).
Los astrónomos Españoles han seguido a este objeto con enorme interés porque anticipaban su aparición. Han estado apareciendo anomalías gravitacionales en la Nube de Oort desde hace algo de tiempo, sugiriendo que las perturbaciones fueron causadas por un objeto cercano de masa considerable. El anuncio de que el G1.9 habia aumentado en tamaño no era un misterio para ellos. Es exactamente lo que se esperaría conforme el objeto se movía cada vez más cerca de la Tierra”.
El potencial y catastrófico peligro que representa el G1.9 para nuestro planeta fue evidenciado en julio de 2009, cuando el planeta Júpiter fue impactado por un cometa grande que entró a su zona planetaria inesperadamente, a pesar de los esfuerzos de los astrónomos para rastrear estos peligrosos objetos. Los astrónomos Rusos y Españoles arguyen que el cometa que impactó a Júpiter fue perturbado por la trayectoria del G1.9, el que hasta hora, no era reconocido ni documentado.
Aunque los Estadounidenses arguyen, también, que el G1.9 haya llegado a sus aproximación más cercana a la Tierra en su órbita, los científicos Ruso no podían estar más en desacuerdo y apuntan al hecho de que la NASA ha “fallado tanto y tan seguido” en sus explicaciones para este gigantesco, en crecimiento y “todavía desconocido” objeto espacial como para ya haber perdido toda credibilidad en cualquier discusión que trate este asunto.
Y tan alarmados están estos científicos Rusos que esta semana pasada Anatoly Perminov, jefe de la agencia espacial Rusa, dijo a la estación de radio “La Voz de Rusia” que se estaban “equipando” para proteger a nuestro planeta de estos “misiles espaciales” incluyendo al asteroide Apofis que muchos creen impactará a nuestro planeta para la década del 2030.
Al reportar estos acontecimientos es importante hacer la observación de que los antiguos pueblos de la Tierra hablaron muchas veces sobre un objeto tipo G1.9 en nuestro sistema solar (Marduk, Nibiru, Planeta X) y advirtieron que cuando se acercara a nuestro sistema solar interior, llegarían el caos y la catástrofe.
Por: Sorcha Faal y como se informa a sus suscriptores Occidentales
Científicos Rusos están informando el día de hoy que el peor Mínimo Solar Profundo de nuestro Sol en 100 años ha sido roto por un cometa recién descubierto y que actualmente se va internando en su superficie y que ha aumentado estos pasados meses la Mancha Solar a 15.7, el más alto que haya habido en el Ciclo Solar 24 desde marzo de 2008, y ha causado una vasta erupción de las explosiones solares Clase C en los últimos 16 años.
El físico Solar David Hathaway del Centro Marshal de Vuelos Espaciales de la NASA, había declarado en 2008 sobre el Ciclo Solar 24 que fue “el año más vacío de la era espacial”, una declaración que revisó en 2009 cuando señaló que “Este es el sol más tranquilo que hemos visto en casi un siglo”.
Tan poderoso ha sido este Mínimo Solar Profundo durante este ciclo que los científicos han reportado una baja en 50 años de la presión del viento solar, una baja en 55 años en las emisiones de radio y mucho más importante, una baja en 12 años de la “irradiancia” solar, la brillantez del sol que ha caído un 0.02% en longitudes de onda visibles y un 6% de longitudes de onda de Ultra Violeta extremo desde el mínimo solar de 1996.
El peligro crítico para nuestro planeta con la caída de la brillantez del Sol está en sus niveles de “irradiancia” que desde hace mucho se han asociado con períodos de enfriamiento global, incluyendo el catastrófico período entre los siglos 16 y 19 llamado La Pequeña Era de Hielo, un hecho del que se ha acusado a los científicos Estadounidenses de ocultar al público para hacer avanzar las ahora ya desacreditadas teorías del calentamiento planetario.
Pero el peligro más grande que enfrenta nuestro planeta no procede de los espantosos efectos de un enorme Enfriamiento Global que podría acaecernos, advierten los científicos Rusos, sino más bien de su creciente potencial de que la Tierra sea impactada por o “interactuar eléctricamente” con un cometa emanando de la desestabilizante Nube de Oort desde la cual, cada vez más frecuentemente, se están lanzando “misiles espaciales” hacia nuestro Sistema Solar.
Tal “interacción eléctrica” entre estos “misiles espaciales” de la Nube de Oort internándose en nuestro sistema solar hacia el Sol ya está sucediendo y está ofreciendo evidencia que sirve de apoyo a las afirmaciones de los científicos Rusos después del descubrimiento hecho por el astrónomo amateur Australiano Alan Watson quien encontró este “nuevo cometa” mientras revisaba imágenes obtenidas por el Visor de Imágenes Hemisférico STEREO-A’s de la NASA (fotografía superior izquierda).
Es importante observar en este punto que los científicos Rusos están firmemente opuestos a sus contrapartes Estadounidenses sobre lo que constituye un cometa y lo que define sus interacciones en el espacio. De ahí que los científicos Estadounidenses señalan en sus teorías que los cometas son “bolas de nieve sucias” cuyas colas son formadas por la expulsión de una masa de hielo, los científicos Rusos se inclinan por la teoría de que están hechos de hierro y otros metales cuyas colas se forman por la interacción electromagnética entre ellos y el Sol. Esto se conoce como la Teoría del Cometa Eléctrico.
El cometa que actualmente se está internando en el Sol cuya llegada fue anunciada hace como quince días con el rompimiento del Mínimo Solar Profundo y la expulsión masiva de explosiones solares apoya las teorías de los científicos Rusos más allá de toda duda, sin embargo, lo que los Estadounidenses no reconocerán pues sus teorías nunca han sido pensadas para dar a conocer la verdad, sino más para el moldeamiento social de su pueblo para mantenerlo lo más alejado posible del conocimiento de lo que el futuro guarda para nuestro planeta.
Y lo que más temen los científicos Estadounidenses por encima de todo es que su pueblo sepa del gigantesco cuerpo planetario llamado G1.9 que se dirige hacia nosotros y que está ahora a un distancia de 60 AU’s (1 AU=la distancia del Sol a la Tierra) de nuestro planeta y que está creciendo en tamaño.
Aunque desconocido para el pueblo Estadounidense el G1.9 desde su descubrimiento la NASA ha seguido sosteniendo que son los restos de la explosión de una supernova que sucedió hace 140 años, una explicación considerada “absurda” por los científicos Rusos que señalan, correctamente, que si una supernova hubiera explotado dentro de nuestro sistema solar a mediados de 1800, hubiera sido no sólo visible para toda la Tierra sino que hubiera sido documentada extensamente.
Apoyando a estos científicos Rusos que señalan que el G1.9 no fue nunca una supernova sino más bien o nuevo planeta para nuestro sistema solar o un sol enano café, están los astrofísicos Españoles cuyos hallazgos podemos leer como sigue:
“El G1.9 fue identificado la primera vez como “restos de una supernova” en 1984 por David Green de la Universidad de Cambridge y más tarde estudiado en mayor detalle con el radiotelescopio Very Large Array (VLA) de la NRAO –Observatorio Radio-astronómico) en 1985 porque era una supernova extraordinariamente pequeña que se creyó era demasiado joven – con menos de 100 años de edad.
Pero en 2007, las observaciones con Rayos X hechas en el Observatorio Chandra de Rayos X de la NASA revelaron que el objeto ¡Era mucho más grande que la última vez que había sido observado! Había crecido un 16% en tamaño. Perplejos por esta observación, el Very Large Array repitió sus observaciones de hace 23 años y verificó que había aumentado en tamaño considerablemente. Sabiendo que una supernova no se expande así de rápido, a menos que acabe de explotar, explicaron que el G1.9 debe ser una supernova “muy joven” – tal vez no más de 150 años de edad. Pero no existe registro de que se haya encontrado una supernova visible correspondiente a ese período histórico (alrededor de la época de la Guerra Civil Estadounidense).
Los astrónomos Españoles han seguido a este objeto con enorme interés porque anticipaban su aparición. Han estado apareciendo anomalías gravitacionales en la Nube de Oort desde hace algo de tiempo, sugiriendo que las perturbaciones fueron causadas por un objeto cercano de masa considerable. El anuncio de que el G1.9 habia aumentado en tamaño no era un misterio para ellos. Es exactamente lo que se esperaría conforme el objeto se movía cada vez más cerca de la Tierra”.
El potencial y catastrófico peligro que representa el G1.9 para nuestro planeta fue evidenciado en julio de 2009, cuando el planeta Júpiter fue impactado por un cometa grande que entró a su zona planetaria inesperadamente, a pesar de los esfuerzos de los astrónomos para rastrear estos peligrosos objetos. Los astrónomos Rusos y Españoles arguyen que el cometa que impactó a Júpiter fue perturbado por la trayectoria del G1.9, el que hasta hora, no era reconocido ni documentado.
Aunque los Estadounidenses arguyen, también, que el G1.9 haya llegado a sus aproximación más cercana a la Tierra en su órbita, los científicos Ruso no podían estar más en desacuerdo y apuntan al hecho de que la NASA ha “fallado tanto y tan seguido” en sus explicaciones para este gigantesco, en crecimiento y “todavía desconocido” objeto espacial como para ya haber perdido toda credibilidad en cualquier discusión que trate este asunto.
Y tan alarmados están estos científicos Rusos que esta semana pasada Anatoly Perminov, jefe de la agencia espacial Rusa, dijo a la estación de radio “La Voz de Rusia” que se estaban “equipando” para proteger a nuestro planeta de estos “misiles espaciales” incluyendo al asteroide Apofis que muchos creen impactará a nuestro planeta para la década del 2030.
Al reportar estos acontecimientos es importante hacer la observación de que los antiguos pueblos de la Tierra hablaron muchas veces sobre un objeto tipo G1.9 en nuestro sistema solar (Marduk, Nibiru, Planeta X) y advirtieron que cuando se acercara a nuestro sistema solar interior, llegarían el caos y la catástrofe.
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Nota de Maru:
Tal vez recordarán ustedes una o dos piezas de Sorcha Faal que nos hablaba de las creencias de los pueblos antiguos, entre ellos de Sudamérica y que mencionaban mucho objetos y hasta esperaban visitas de la mencionada Nube de Oort?
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